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Tener una nómina es un logro para muchos jóvenes que se incorporan al mercado laboral. La nómina es el documento que sirve para justificar el pago de las retribuciones al trabajador y que las empresas entregan al finalizar cada mes para informarles del sueldo que perciben por los servicios prestados. Pero la nómina incluye más información que los empleados deberían conocer y que desde nuestra escuela de negocios hoy te detallamos.

La empresa emite la nómina para informar a los trabajadores sobre los detalles de su salario y más cosas. Por ejemplo, en la nómina encontramos reflejadas otros tipos de retribuciones, las bonificaciones o las deducciones, una información relevante para el empleado.

Además, la nómina sirve de justificante del pago del salario. De hecho, si el pago se hace “en mano”, la nómina debe ser firmada por el trabajador cuando se le entrega el duplicado de la misma y se le abona esa cantidad, para dar fe de que se ha recibido. Si el pago se hace por transferencia bancaria, no es necesario que se firme, ya que se entiende que el comprobante del abono del banco es suficiente.

 

Lo que la empresa te dice en tu nómina

La empresa que contrata es quien emite la nómina y la responsable de que en ella figuren correctamente los datos referidos. La información que se recoge en la nómina se puede dividir en cuatro apartados: un encabezamiento que informa sobre las partes (empresa y empleado) y el periodo de liquidación del contrato; las percepciones salariales y no salariales; el sueldo bruto y neto; y las bases de cotización.

 

Información que encontramos en la nómina

En la parte superior de la nómina se indican los datos de la empresa y el trabajador, incluyendo los números identificativos (CIF y DNI), así como el código de cuenta de la Seguridad Social de la empresa y número de la Seguridad Social del trabajador.

Además, se refleja el puesto que ocupa el trabajador en la empresa y el periodo de liquidación al que se refiere la nómina.

 

Lo que percibe el trabajador por su trabajo

Otra de las partes importantes de la nómina es la que refleja las percepciones salariales y, también, aquellas que no están dentro del sueldo, ya que son beneficios que otorga la empresa al trabajador.

Las percepciones salariales se componen del salario base, y los complementos, cuando los haya. Por ejemplo, un complemento puede establecerse por la antigüedad del trabajador en un puesto o por desempeñar un trabajo cuyas características especiales exige un mayor esfuerzo, dureza o responsabilidad, como puede ser los complementos de periodicidad, nocturnidad (turnos de noche) o peligrosidad.

En lo que se refiere a percepciones no salariales, se trata de aportaciones de la empresa al trabajador que suelen estar relacionadas con el transporte o la manutención, y que sirven para compensar los gastos que realiza el empleado por trabajar en la empresa (desplazamientos, comida, etc.).

 

Salario bruto y salario neto

El salario bruto es la suma de todas las percepciones salariales. Se calcula a partir del salario bruto anual acordado entre el trabajador y la empresa, dividido entre el número de pagas anuales, que suelen corresponderse con las mensualidades y las pagas extra (12, 14, 16…). Sin embargo, ésta no es la cantidad que el trabajador percibe en su nómina.

El salario neto es lo que realmente se ingresará en la cuenta del empleado. Esta cantidad se obtiene al restar del salario bruto las aportaciones del trabajador a la Seguridad Social y la retención del IRPF aplicable.

 

Deducciones y retenciones

A nuestro sueldo se le aplican unas deducciones y retenciones. Una deducción es un descuento o rebaja. Del salario de los trabajadores se aplican deducciones entre las que se incluyen las cotizaciones a la Seguridad Social, además de las cotizaciones que se indican en la nómina, como contingencias comunes, profesionales, desempleo, formación…

También se refleja la cantidad destinada a las retenciones del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Se trata de un importe que la empresa paga al trabajador y que se retiene en pago de la Renta del año siguiente.

 

Las bases de cotización

Las deducciones a efectuar en el salario de los trabajadores resultan de aplicar de los diversos tipos a las bases de cotización. Son tres:

  • Base de cotización por contingencias comunes

  • Base de  cotización por contingencias profesionales (accidentes de trabajo y enfermedades profesionales) y conceptos de recaudación conjunta (desempleo, fondo de garantía Salarial -fogasa- y formación profesional)

  • Base de cotización adicional por horas extraordinarias

Están especificadas en la parte inferior de la nómina y sirven para calcular las prestaciones a las que el empleado tendrá derecho en un futuro.